El nuevo gestor energético de Antucoya comentó la importancia de la eficiencia en esta materia y los desafíos que tiene la Compañía.

Hace dos meses, Patricio Valenzuela llegó a Minera Antucoya a ocupar el cargo de gestor energético. Es Ingeniero Civil en Electricidad y cuenta con un magíster en Eficiencia Energética y Sostenibilidad del IL3 de la Universidad de Barcelona y un magíster en Economía Energética de la Universidad Santa María, donde actualmente cursa un MBA. A sólo semanas de su llegada a la organización, contó los aspectos más importantes de su gestión y los desafíos que enfrenta el área.

¿Por qué es importante la gestión energética en la Compañía?

En Chile, lo que vino a dar un impulso a este tema fue la Ley 21.305 de Eficiencia Energética (2021). Luego, apareció un decreto que aterrizó lo que tienen que hacer las grandes compañías para cumplir con esta norma, y lo que nosotros debemos hacer como grandes consumidores de energía es implementar este sistema, llevar el control de nuestros insumos energéticos y mejorar su uso, siendo más eficientes.

¿Cuáles son los desafíos que tiene Minera Antucoya en esta materia?

Tenemos grandes desafíos por delante. El primero, certificar el sistema de gestión de energía y, para ello, en diciembre de 2023, una entidad certificadora realizará una auditoría para evaluar nuestro cumplimiento. El gran reto, durante lo que nos queda del año, es cumplir con todos los requerimientos y poner en funcionamiento nuestro sistema para obtener la certificación.

El segundo es manejar una cartera de proyectos relacionados con la eficiencia energética, la electromovilidad y la descarbonización. Además, nos enfocaremos en difundir y capacitar sobre este tema. En esta línea, vamos a lanzar un curso para que toda la Compañía conozca más sobre el cambio climático y la gestión energética, realizaremos entrevistas y reportes, y difundiremos la Política Energética en todas las áreas de la organización.

¿De qué se trata la Certificación de Eficiencia Energética norma 50.001?

Consiste en aplicar y cumplir la norma ISO 50.001 que busca levantar un sistema de mejora continua para optimizar el uso de los recursos energéticos, siendo más eficientes y obteniendo beneficios económicos y de menor impacto al medioambiente en el mediano y largo plazo.

La Ley de Eficiencia Energética en Chile entrega dos opciones, una es realizar una certificación ISO 50.001 y la otra es basarse en ella, pero no tener un cumplimiento específico de la ISO. Como compañía elegimos la certificación, ya que es una norma reconocida a nivel internacional y existen consultores especializados en este ámbito. Esto nos brinda un sistema estructurado y normado que define los requisitos, acciones y avances necesarios para cumplir con la ley.

¿Por qué es importante certificar el sistema de gestión?

Es importante para dar cumplimiento a la normativa vigente, y, sobre todo, para mejorar el uso de nuestros recursos energéticos disminuyendo los impactos al medioambiente. Adicionalmente, la certificación permite mantener un control continuo: el certificador viene, te da el “ok” y luego -cada año- hay auditorías de verificación. Este proceso nos incentiva a tener el sistema siempre en funcionamiento y a presentar más proyectos de mejora. El objetivo es establecer un sistema sólido, mejorar continuamente y optimizar el uso de los recursos energéticos cada año.

¿Algo más que creas importante relevar de este proceso?

Creo que es súper importante entender que el sistema de gestión energética es un trabajo en equipo, que involucra a todas las personas de la Compañía. El gestor energético no puede trabajar solo, no resulta si trabaja aislado. Por eso, hemos establecido un Comité de Gestión Energética en el que participan áreas relevantes de la organización, para que esto llegue a todos y sepan qué hace la Compañía en esta materia.

Hemos mejorado mucho y las personas están entendiendo cuál es la importancia de la gestión energética. Por eso, es muy importante destacar que queremos que sea parte de nuestra cultura y para lograrlo debemos trabajar con todas las personas de la organización, formando equipos y mejorando el uso de los recursos energéticos en cada ciclo productivo.