Antucoya consolidó prácticas en terreno y reportabilidad, reconociendo el valor de “Yo digo No” para fortalecer la cultura preventiva. 

Tras nueve meses de activaciones en terreno con la participación de empresas colaboradoras, Minera Antucoya cerró la campaña de Disciplina Operacional con un mensaje claro: la seguridad no es un evento, es la rutina que protege a las personas y sostiene la operación. La Gerencia de Seguridad y Salud Ocupacional dio término al ciclo iniciado en diciembre de 2024 con una última jornada junto a Michelin y KalTire.

“Fueron nueve meses con alta participación y recursos puestos a disposición, cerramos un ciclo exitoso y abriremos otro que seguirá fortaleciendo la cultura de seguridad”, sintetizó Carlos Rojas, jefe de Protección Industrial y Emergencias y líder de la campaña. Además, valoró la consolidación de prácticas clave en la faena: detener cuando corresponde, evaluar la condición, corregir el desvío y retomar el trabajo con el estándar en alto.

Liderazgo en terreno

En la reunión de seguridad con empresas colaboradoras, gerentes, supervisores y equipos operativos compartieron aprendizajes y reconocieron conductas que previenen prácticas inseguras. El llamado fue a priorizar decisiones seguras, planificar los trabajos y mantener presencia en terreno para identificar y controlar riesgos críticos antes de que cualquier evento escale.

En la instancia explicaron que los indicadores de reportabilidad y asistencia mejoraron en relación al año anterior, una señal positiva que exige mantener el estándar alto. Jenny Muñoz, superintendenta de Gestión de Riesgos de Seguridad, lo subrayó al señalar que “los resultados mejoraron, pero no bajamos la guardia. La seguridad es diaria, especialmente en semanas con reemplazos y alta rotación. La planificación de personas y trabajos es intransable”.

Reconocimientos

El cierre incluyó reconocimientos a trabajadores que destacaron por Atento Socio Preventivo y por ejercer el “Yo digo No” en terreno, lo que valida una cultura donde detener a tiempo, corregir y retomar con control es parte del trabajo responsable. En ese marco, Carlos Martínez, supervisor de perforaciones, destacó que decir “Yo digo No” es priorizar la vida. «Es validar a los equipos. Primero está mi familia, mi vida y la de mis compañeros. Si detenemos, mitigamos y seguimos, trabajamos más seguro”, concluyó.