La Gerencia de Medio Ambiente de Antofagasta Minerals realizó una visita que permitió revisar avances, detectar brechas y reforzar el compromiso con la excelencia.

Minera Antucoya fue el punto de encuentro para una nueva jornada de acompañamiento, donde el equipo de Medio Ambiente del Grupo Minero combinó visitas en terreno con auditorías para verificar la gestión de riesgos regulatorios, el cumplimiento de exigencias ambientales y normativas. Esto en dos jornadas de revisión integral, además de revisar el cierre de eventos operacionales reportados a la Superintendencia de Medio Ambiente.

Andrea Ibáñez, especialista senior en gestión operacional de Antofagasta Minerals, destacó que la actividad permitió evaluar la implementación del modelo y el cumplimiento de los controles establecidos. “Las áreas operativas muestran un completo conocimiento de las exigencias ambientales que están a su cargo. Se evidenció un alto compromiso de los equipos y avances significativos respecto a los planes definidos”, afirmó.

La instancia permitió constatar el estado de cumplimiento y levantar oportunidades de mejora. Carmen Gloria Valenzano, superintendenta de Medio Ambiente, reveló la importancia de articular la gestión ambiental como parte de la estrategia operacional. “Fue una actividad planificada e integrada que evidencia el valor de trabajar de manera preventiva. Los aprendizajes obtenidos nos permiten robustecer nuestras capacidades y avanzar proactivamente en línea con los desafíos del negocio”, comentó.

Recorrido en terreno

Durante la jornada, los equipos recorrieron distintos puntos de la operación, incluyendo las piscinas PLS, el Truck Shop, el barrio cívico, la planta de electroobtención y la losa de lavado de camiones. Estas visitas permitieron observar en terreno la implementación de controles, el estado de las medidas correctivas y el avance en el cierre de brechas ambientales.

Mario Robles, ingeniero senior Mantenimiento – Equipos Móviles, destacó que la puesta en marcha de la losa de lavado representa un hito relevante dentro del proceso de acompañamiento. “Este activo no sólo cumple con una obligación ambiental, sino que también aporta directamente a nuestra gestión de mantenimiento. Poder lavar los equipos antes de su ingreso al taller mejora significativamente la calidad de los trabajos en equipos móviles”.

Por su parte, Marcela Araya, ingeniera en Gestión de Riesgos Regulatorios y Permisos, resaltó el valor de la visita para fortalecer el trabajo conjunto y la mejora continua. “Estas instancias generan un espacio de confianza y diálogo abierto con los líderes de proceso, que va más allá de verificar el cumplimiento. Nos permiten compartir experiencias y aprendizajes con otras compañías del Grupo, lo que enriquece tanto al equipo de Medio Ambiente como a las áreas involucradas”, finalizó.