El espacio fue pensado para el descanso, la conexión y el bienestar de los trabajadores en el área Mina.


Con salas amplias, zonas de descanso, un gimnasio equipado, oficinas y dos comedores móviles, el nuevo Barrio Cívico renueva la experiencia diaria en faena. Más que una instalación está pensado para ser un espacio que impulsa el bienestar y fomenta el encuentro y la proyección para los trabajadores del área Mina.
“Contar con instalaciones de estándar moderno ayuda a entregar un mejor confort a operadores y supervisores”, destacó Sebastián Mora, ingeniero senior de Carguío y Transporte, quién subrayó que el lugar viene a reemplazar a las estructuras instaladas en 2014, marcando un avance significativo en la calidad de vida laboral.
La implementación de este nuevo sector responde también a los requerimientos de la expansión del yacimiento, que demanda liberar el terreno donde actualmente se ubica el antiguo Barrio Cívico. Así, Antucoya no sólo mejora las condiciones laborales, sino que también garantiza la continuidad operacional en el marco de su crecimiento.
Por su parte, Natalia Seguel, operadora de Producción, expresó su entusiasmo por las nuevas instalaciones: “Los sillones reconfortantes y máquinas de ejercicio ayudan a despejar la mente antes de volver al trabajo”, comentó. Además, agregó que el diseño luminoso y acogedor del área favorece la convivencia entre compañeros.
“El nuevo Barrio Cívico nos permite hoy ofrecer una infraestructura moderna, cómoda y segura para nuestros colegas”, explicó Francisco Araneda, supervisor de Servicio a las Personas. Asimismo, agregó que la reorganización de servicios como alimentación, aseo diario y acondicionamiento de espacios fue un desafío logístico, pero que se logró gracias al apoyo de las personas del área.
La concreción de este proyecto que fue inaugurado en marzo y se comenzó a utilizar en abril, fue posible gracias al esfuerzo conjunto de las superintendencias de Servicio a las Personas y Carguío y Transporte.






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