La ingeniera de Gestión de Riesgos Operacionales en Medio Ambiente valora la flexibilidad y el respaldo de su entorno laboral.

«El 2024 pasé por momentos complejos, pero siempre sentí el respaldo de mi equipo. La Compañía me entregó apoyo y me dio el espacio para sobrellevarlo», afirmó Mónica Rivera, ingeniera de Gestión de Riesgos Operacionales.

La pérdida de su padre y hermana en un corto período fue un golpe difícil. “Fueron meses duros, pero nunca me sentí sola. Mi equipo y mi jefatura estuvo siempre conmigo, dándome todas las facilidades. Además, en Personas y Organización me ofrecieron apoyo psicológico, lo que fue de gran ayuda”, señaló.

Asimismo, recordó Mónica, pudo hacer uso de sus días de Calidad de Vida y le ofrecieron todo el tiempo necesario para volver a trabajar o subir a faena cuando estuviera preparada. Sin embargo, ella quería volver. “Necesitaba dejar de pensar y enfocarme en otra cosa”, agregó. 

Crecimiento y compromiso

Mónica lleva más de dos años en la Compañía, consolidando su trayectoria en el área ambiental. Su experiencia previa en organismos públicos y privados le ha permitido aportar con una visión estratégica en la gestión de riesgos.

A pesar de los desafíos personales, se ha mantenido firme en sus responsabilidades. “Soy autoexigente y me gusta cumplir con mi trabajo, pero contar con un ambiente comprensivo hizo la diferencia”, afirmó.

Su familia es su prioridad, especialmente sus sobrinos y hermanos. «Mi familia es lo más importante para mí. Aunque mi vida laboral es exigente, siempre trato de equilibrar mis responsabilidades con el tiempo que paso con ellos», comentó.

En su tiempo libre, disfruta compartir con sus amigas, leer, ir a la playa y pintar mandalas. «Me encanta pasar tiempo con mi familia y amigas, siempre trato de mantener una vida social activa”, concluyó.