Los equipos entregan una mayor protección a los pasajeros, además de un sistema que elimina virus y bacterias.

Minera Antucoya tiene seis buses diésel y uno eléctrico. Actualmente, la Compañía está renovando la flota interna con el fin de entregar mayor bienestar a los trabajadores. Los nuevos equipos cuentan con mejoras desde el punto de vista de la comodidad, como nuevos asientos G8 (octava generación), enchufes USB, calefacción reforzada y un sistema de BioSafe que elimina virus y bacterias en el aire acondicionado.

“La principal ventaja de estos buses es que fueron diseñados en cumplimiento de la normativa ECE R66.20 de deformación estructural que busca garantizar la seguridad de los pasajeros en caso de vuelco, dando mayor nivel de protección a los pasajeros”, explicó Alejandro Migueles, administrador de contrato de Sokol.

Bienestar y disponibilidad

La flota interna opera diariamente con cuatro equipos para la operación de la Mina y dos para servicios en la Planta, movilizando a cerca de 70 personas en cambios de turno y recorriendo en promedio 29 mil kilómetros mensuales. Para Alejandro Migueles, este recambio permite mantener un alto nivel de disponibilidad de los equipos, lo que se ve reflejado directamente en el soporte a la operación de la Mina.

La renovación de la flota también responde a los acuerdos contractuales, para evitar la realización de un overhaul de los buses actuales. “Optamos por adquirir nuevas unidades de mejor tecnología y confort”, afirmó Gabriela Ruiz-Esquide, superintendente de Servicio a las Personas.

Electromovilidad

Asimismo, Gabriela abordó el camino hacia la electromovilidad, señalando que uno de los taxibuses que actualmente tienen en faena es eléctrico, lo que plantea la necesidad de evaluar una transición total a este tipo de energía. En conjunto con la Gerencia de Descarbonización de Antofagasta Minerals, están realizando un análisis de la autonomía y de la ubicación óptima de estaciones de carga, considerando los recorridos dentro de faena y los trayectos interurbanos.

El plan de transición a la electromovilidad está siendo desarrollado con miras al próximo contrato de transporte de personal, que debiese estar operativo en 2026. Mientras tanto, la renovación actual permitirá mejorar la experiencia de los trabajadores en sus desplazamientos diarios dentro de la operación.

“La electromovilidad es una aspiración del Grupo Minero. El punto es cómo queremos transitar a ella. Queremos hacerlo de manera planificada, asegurándonos de que el proceso sea seguro y eficiente, aprendiendo de experiencias previas, evitando el ensayo y error”, finalizó la superintendente.